sábado, 12 de junio de 2010

LA BAILAORA



Algunas veces el azar sale de caza. Y deja abandonados sus guantes de espinas para rozarte con un dedo níveo. Entonces, comprendes que aquella otra persona no ha aparecido porque sí. Y sientes fiebre. Y deseo. Y ya no quieres que sucedan más cosas sin estar juntos.
Pero ten cuidado cuando te muevas.
Hazlo despacio, muy despacio.
El azar es viejo y sabio y con mucha mala leche.
Le gusta poner espejismos. Ahí, frente a tu calle. Espejismos que saca de tus recuerdos y pinta en otros cuerpos.
Sólo para ver la cara de idiota que pones.




Madrid, antes de la desaparición.
JM estaba a punto de salir del portal cuando casi se dio de bruces con su tío.
-     ¿Dónde vas tan arrebatado, sobrino?
-     Me voy, que he quedado.
-     Pues yo venía a hacerte una visita antes de ir a echar una partida con Pepe El Viagra.
-    ¿Una pardita de Warcraft?
-    Nada de esos endemoniados juegos de internet, una partida de mus, como se ha hecho toda la vida. ¿Y tú a quién vas a ver?
-     A una chica preciosa que he conocido hace poco.
-    Ah. ¿Y tiene nombre esa chica preciosa?
-    Qué más te da. Mira qué te gusta cotillear. Bueno, se llama Piluca. Piluca "La retorsía". Es bailaora.
-    ¿Bailarina o bailaora?
-    Bailaora, bailaora.
-    Pero si a ti no te gusta el flamenco.
-    El flamenco no, pero la bailaora sí. Tiene un cuerpo espectacular.
-    Entiendo.
-    Y además, estoy empezando a cogerle gusto al flamenco.
-    Me hago cargo.
-    Mira, ahí está. Viene ella a recogerme. Es la de ese coche.
Un Mini One  redujo con brusquedad de marcha; el motor rugió con estrépito hasta que el vehículo frenó del todo y quedó estacionado en doble fila. Se abrió la puerta y asomaron unas botas de cuero blancas, luego unas piernas bien esculpidas, unos muslos firmes y  una falda vaquera. La conductora pareció recoger algo del salpicadero y , por fin,  salió afuera. Su rostro era ovalado y de cutis claro; lucía una ondulada melena rubia y sus ojos castaños brillaban con picardía. Hizo una seña con la mano, como invitando a apresurarse.
-    Sí que tiene buen cuerpo, sí –exclamó mi tío, que no había perdido detalle de los movimientos de la chica–. Será por el ejercicio, claro. Y qué ojazos. Aunque un poco delgada;  para cuerpos, los de las mujeres de mis buenos tiempos.
-    Tío, estos son tus tiempos también. ¿O es que no estás vivo? Además, estás hecho un chaval.
-    No exageres, no exageres. Aunque te agradezco el cumplido. La guapura de la familia se la llevaba tu madre, que era clavadita a la Garbo, aunque uno…
-    Deja a mi madre, haz el favor. Vete a echar la partida con Pepe El Viagra, que te estará esperando. Ya te llamo yo y quedamos para comer este fin de semana.
-    Espera un momento, siempre con prisas, que te va a dar algo, hijo. ¿Por qué no me presentas a la moza?
-    Qué pesado eres, venga sí, vamos. Te presento, pero hola y adiós, que luego te enrollas y en cuanto me descuido empiezas a contar tus aventuras en Guinea, ¿o era en alguna batalla de la primera guerra mundial?
-    No te pases de listo. Quiero echar un vistazo de cerca a esa muchacha, la vista me falla con la distancia. Y luego, si no me equivoco, te daré un consejo. Que no seguirás, claro. Pero te lo voy a dar. Te guste o no.
-    Creo que ya la estás liando. Estás haciendo un mundo sólo porque salgo a divertirme un poco. Ves fantasmas donde no los hay.
-    No, sobrino, el que ve fantasmas donde no los hay eres tú.

JM y Piluca se habían conocido en El Kraken. Que ella se entregase con pasión al arte del flamenco, no era obstáculo para que entre sus otras aficiones figurasen el reggae y la música house. Aquella velada se proyectaban en las pantallas gigantes del local videoclips del top ten. La chica rasgaba el contraluz de una pantalla con su perfil sinuoso, como una sombra ondulante bajo un cielo desnudo.
JM no necesitó más. Algo en su instinto profundo le impulsó a abordar a la chica. Y pocos minutos después ambos se guiñaban el uno al otro con sonrisas de terciopelo.

La estampa de Piluca no podía alejarse más del estereotipo de la bailaora flamenca.  Sin embargo, lo que había de inmediato llamado la atención del tío de JM no tenía nada que ver con eso: era la similitud que los rasgos de la chica guardaban con los de Raquel.
Por desgracia, ahí terminaban todas las semejanzas.
Piluca era de forma evidente más joven de lo que hubiera sido Raquel de estar viva.
En contraste con el carácter cálido, compasivo y noble que tantas veces había oído comentar a JM de Raquel, Piluca se mostraba como la otra cara de la moneda: era engreída, superficial e instalada en la firme creencia de que el mundo, y en particular los hombres, estaban hechos para acompañar el ritmo de sus caderas.

La relación entre Piluca y JM estallaría como el choque entre el pedernal y la pólvora en cuestión de poco tiempo. Mientras tanto, la bailaora se sentía seducida por  la compañía de un hombre mayor que ella pero bien parecido, con un físico atlético y tocado por cierto aire de misterio. Además, lo mismo podía llevarla al último local de moda de música techno como a la ópera. Aún recordaba lo que había disfrutado cuando asistieron a la representación de Carmen en el Teatro Real.
Por su parte, JM se hallaba tan encaprichado de ella como un niño de una videoconsola nueva. Su  verdadero corazón estaba lejos, muy lejos, y cada día se distanciaba más hacia las corrientes oscuras donde no hay retorno.

-    Piluca, te presento a mi tío…
-    ¡Qué tal, abuelo!
-    Encantado, señorita, ¿cómo está usted? Yo no tengo nietos, ni hijos. JM es toda mi familia y más que un sobrino es como un  hijo.
-    Ya. Vale, vale. Sí, ya me ha contado “éste”. Cariño –dijo Piluca volviéndose hacia mí y dando de golpe la espalda a mi tío–, ¿nos vamos ya o qué? ¿No me ibas a llevar a ese sitio nuevo?
-    Sí, tienes razón. Te lo prometí. Es un sitio curioso –expliqué, girándome a mi vez para aproximarme a mi tío y así intentar que pasara por alto la grosería de la chica–. A ratos ponen música clásica, sobre todo ópera, y a ratos melodías de heavy metal o, mejor dicho, de metal sinfónico.  El local se llama Wagner.
-    ¡Anda! –terció Piluca interponiéndose entre mi tío y yo–. Ese es el de “El Señor de los Anillos” ….”Mi tesoro” –dijo Piluca imitando al gollum– Jo, qué fuerte.
-    Permítame que le saque de su error, señorita –intervino ahora mi tío, desplazándose para mirar de frente a la bailaora. Aquello comenzaba a parecer una danza de salón–. Wagner es un músico germánico que compuso un ciclo de óperas llamadas “El anillo del nibelungo” , cosa que sin duda usted confunde con "El Señor de los anillos" de la novela de Tolkien, o con la película basada en la novela.
-    Oiga, abuelo, deje ya de rayarme o ¿es que me está llamando tonta? –le espetó Piluca, que no era lista pero si intuitiva.
-    Nada más lejos de mi intención, señorita. Sólo intentaba ilustrar sobre lo que, me temo, es  una carencia cultural relevante.
-    Pues ilustre usted a su señora y si no tiene, a su gato –replicó Piluca, encendida.
-    Mira, tío, si viene por ahí tu amigo Pepe El Viagra –dije, señalando hacia la calle de enfrente en un esfuerzo desesperado para cortar de raíz la bronca.
Piluca siguió mi gesto con la mirada y se fijó en el amigo de mi tío que caminaba despacio pero resuelto hacia nosotros. Se puso los brazos en jarra. Y abrió la boca:
-    ¿Pero qué pasa? ¿Es que esperamos un jodido autobús del INSERSO? ¡Pepe El Viagra! Lo que faltaba: un viejo follador.
-    ¡Cierra la boca, Piluca! –exclamé indignado–. Esa persona es un buen hombre y amigo de mi familia.
-    Señorita, es usted una deslenguada y una insensata –aprovechó para añadir mi tío.
-    Y usted, usted –pugnaba Piluca, roja como un tomate,  por encontrar el insulto más mortífero.
-    Que te calles, nena. Métete en el coche y vámonos. O vete tú sola si quieres.
Piluca se introdujo en el coche y cerró la puerta sin decir palabra. Por fin, sacó la cabeza por la ventanilla y dijo:
-    ¿Vienes o qué, JM?
-    Te llamo mañana, tío. Y no le des importancia a esto. Ya sabes cómo es la gente joven ahora. No es mala intención, es ignorancia.
-    No te preocupes más, sobrino. Ya te daré ese consejo que te he dicho otro día. Ahora, vete ya y pásalo bien.
-    ¿Estás bien? ¿Seguro?
-    Que sí. Márchate. Adiós.
-    Hasta luego, tío. Hasta luego, Pepe.
Pepe El Viagra devolvió el saludo a JM en el  momento en que llegaba a la altura de su tío. Piluca metió la primera marcha y pisó a fondo el acelerador. Los neumáticos chirriaron sobre el asfalto y flotó un olor a goma quemada.

-    ¿Con quién va tu sobrino? –preguntó Pepe.
-    Con el diablo sobre ruedas. No pongas esa cara, Pepe, es una broma. La nueva acompañante de mi sobrino es bailaora.
-    Es muy guapa. Me recuerda a alguien…
-    A Raquel.
-    ¿La Raquel de…?
-    Sí. La Raquel de mi sobrino. ¿Recuerdas que JM te enseñó unas fotos en el ordenador un día que te pasaste por su casa?
-    Sí, ahora que lo dices me acuerdo bien. Yo no quise decir nada por educación, pero se le notaba obsesionado.
-    Mi sobrino es prisionero de sus propias sombras. Las mujeres a las que busca desde que falleció Raquel tienen todas algún parecido con ella. Al menos las que yo conozco o de las que me ha hablado. No se da cuenta de que es una manera de destruirse. Busca el amor y el perdón de un espejismo. ¿Sabes la manía que le ha entrado ahora?
-    No sé; por lo que dices, cualquier cosa.
-    Pone lo primero que se le ocurre en un papel, luego hace con él una pelota y lo guarda en un cajón. Mira lo último que ha escrito –dijo el tío de JM, sacando un papel arrugado de su bolsillo y desplegándolo con cuidado–: "Ella era una figura sola y oscura. Sólo los animales de la noche la vieron llegar."
-    Y eso qué significa.
-    No lo sé, Pepe, no lo sé. Quería preguntárselo, pero, ya ves que iba con prisa. Últimamente lo encuentro todavía más raro que de costumbre. Recibe mensajes de una enigmática mujer que siempre firma con un extraño dibujo. Mi sobrino dice que es una mariposa negra.
-    ¿Una mariposa negra? Oye, perdona que te lo diga, pero como hay confianza... Para mí que tu sobrino está jamao.
-    ¿Jamao?
-    Sí, hombre. Que no anda bien de la azotea, ya sabes.
-    Quita, quita. De loco no tiene nada. Lo que...
-    No si yo quería decir...
-    Mira, Pepe, lo que necesita el pobre es enderezar su vida con una buena chica, con alguien que no tenga nada que ver con Raquel ni con la otra.
-    Ah, sí, la otra, claro. Tienes razón. No me acordaba. La verdad es que tu sobrino nunca ha tenido suerte con las mujeres. Eso y que las mujeres ya no son como las de antes.
-    Yo también suelo decir lo mismo, pero soy consciente de que estoy faltando a la verdad. Y mucho. De hecho, no sé si te he contado algo de las mujeres que mantienen correspondencia con mi sobrino por mediación de la página que tiene en internet. La página se llama "La danza eludible". Un día de estos me tienes que enseñar cómo se pone una página de esas, aunque odie esas máquinas de los cojones.
-    Ya aprenderás a manejar los ordenadores y a construir un blog. Te enseño cuando quieras. Pero ahora háblame de esas damas con las que habla tu sobrino.
-    Oh, he curioseado un poco, sólo un poco. Pero, Pepe, esas damas son algo serio, créeme, de campeonato. Y saben más que los ratones coloraos. Inteligentes donde las haya. Hay una que...
-    Cuenta, cuenta.
 

El tío de JM y Pepe El Viagra tiraron en dirección Gran Vía abajo. La conversación derivó inevitablemente sobre sus años de juventud y de lo que hubieran sido capaces de hacer ahora.
La luz del atardecer bañaba de velos rojizos las calles que desembocaban en  la Plaza de España.
A quinientos quilómetros, una figura alta, delgada, vestida de oscuro, contemplaba el crepúsculo sobre el horizonte del mar. Llevaba puesto un colgante antiguo que reflejaba con tonos sobrenaturales los últimos rayos de sol: una mariposa negra.



Escrito en La Manga un domingo de Junio por el Intimista Secreto.
Escuchando Stereo Love
http://www.youtube.com/watch?v=3d6_5n6u2e4&feature=related

Imagen:
Image Title: The dancer
Artist Name: Jinwoo Lee
Web: http://jjcoolio.cgsociety.org/gallery/

25 comentarios:

  1. ¿Puedo llegar a tu alma?
    ¿Puede llegar a mis pensamientos?
    ¿Puedes prometerme que no le dejarás ir?
    Todas las cosas que necesito
    Todas las cosas que tu necesitas
    Puede hacer que se sienten tan reales...

    Mientras te leía, imaginando tus palabras con la música de fondo de Wagner(músico q me encanta escuchar), no logroba relacionar la letra con lo que oia.
    Luego puse el video q dejaste, el q escuchabas y encajó perfecto.
    Me pierdo entre tus palabras, y eso es lo q mas me agrada.
    Felicitaciones!
    Besos

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  2. Eres demasié escribiendo.
    Enganchas... me enganchas y es difícil eh?, que yo me pierdo enseguida.
    Un biquiño cual brisa marina y sigue así.

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  3. Necesitaba desconectar mi mente de todo lo que tengo encima y lo has conseguido Intimista.Tiene razón tu tío,sigues buscando a Raquel entre todad aquellas mujeres con las que te relacionas,sabiendo que jamás la encontrarás.Me arrancaste una sonrisa con el "cambio de palabras"entre tu tío y la bailaora..tiene razón ,es soez pero guapa....
    En cuanto a la Mariposa Negra,me recuerda a la película peruana con su mismo nombre...
    Una conspiración quizás formada para ocultar cosas increíbles...
    Besos y gracias.
    Mor.

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  4. Primero, dile a tu tío que me puede enviar las fotos que quiera, ya tiene ganada toda mi simpatía y nunca me parecería una falta.

    Segundo, JM, ya puede ser todo lo guapa que quiera la bailaora, no sólo es tonta y grosera, es que además es una emboscada... ¿no te das cuenta? Pensé que sí, lo escribes al principio, ay.

    Y por último, me encanta, me atrapa, me hace reír, y mantiene toda mi antención y concentración.

    Besos pa tu tío, pa su amigo el Viagra y un abrazo para ti.

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  5. Llevaba puesto un colgante antiguo que reflejaba con tonos sobrenaturales los últimos rayos de sol: una mariposa negra.

    Tu Tio Encantador , escucha sus consejos

    Un Abrazo

    Ƹ̵̡Ӝ̵̨̄Ʒ Ƹ̵̡Ӝ̵̨̄Ʒ Ƹ̵̡Ӝ̵̨̄ƷƸ̵̡Ӝ̵̨̄Ʒ Ƹ̵̡Ӝ̵̨̄Ʒ Ƹ̵̡Ӝ̵̨̄ƷƸ̵̡Ӝ̵̨̄Ʒ Ƹ̵̡Ӝ̵̨̄Ʒ Ƹ̵̡Ӝ̵̨̄Ʒ

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  6. Holita Sap Intimis! Que sucedio por aquí, varias gentiles damas en contra de la tal Piluca (chuikis Morgana guerrera). Si la tuvieran aquí... Tan maluca no es, hay peores. Me causa mucha gracia las variedad de emociones que pueden generar tus personajes. Es cool para un escritor. Todo menos indiferencia. Me haces reir despatarrada, con tu auto-descripción mmmmm, y como señor mayor enseñabas a Piluca ¿Eres como Russel Crowe¿ jaja. Tengo edipo mal resuelto con ese sujeto, me dice mi mamá, jaja. Es muy reveladora, lástima que dice tu amigo que estas jamao, mira quien habla: YO. El video super precioson, por fin! fue el que más me gusto de tus recomendaciones (hasta ahora), música y letra bellisíma y concuerda con lo que deseaste trasmitir, ya lo guarde. El final como siempre, latente el suspenso para seguir leyendo. Fenomenal todo, Sapito. Y estoy a la espera de otras aventuras en busca de ese gran amor redentor, que sane. Un beso de terciopelo (te lo copio jaja)

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  7. Este comentario ha sido eliminado por el autor.

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  8. Holita sapis andariego, pasaba a ver que onda por aqui. Cuida mi corazón sapis que te lo preste el viernes pasado por lo sol que fuiste, y te lo has llevado varios días de viaje juasss (que confiazudo, que interpretación haria Freud, jiji) no lo vas a dejar olvidado por esos caminos. Cuidáte muchote.
    Muahhhhhh de princesa. Nos vemos.

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  9. Te haces desear... gota a gota, pero acabas calando hasta los huesos.:)

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  10. Lo siento. Siento este silencio. Sé que los silencios se vuelcan sobre uno mismo, pero tuve que marcharme un poco lejos durante unos días. No es de esos viajes que resultan precisamente beneficiosos para la salud, ni física ni mental. Pero, bueno, es lo que hay.
    El problema es que a la vuelta, cuando uno se mira al espejo, se pregunta quién es el gilipollas que se ha colado ahí.
    Ni se reconoce la cara de uno mismo, ni se reconocen los viejos hábitos. Vamos a ver: ¿yo fumaba? No. ¿Me echaba la siesta? Cuando podía. ¿Yo escribía? Sí
    Pues no tengo ganas de escribir.
    Ni de dormir la siesta.
    Lo único de lo que tengo ganas ahora es de apoyar la cabeza sobre unos muslos acogedores y que me acaricien la cabeza. Con mimo. Como a un gato.
    Más o menos.
    Miauuuu.
    Si habrá cambiado mi ánimo que tampoco me dice una invitación para una fiesta en El Kraken que veo sobre una mesa.”Gran fiesta de luna llena –se lee en la invitación–. Noche techno con DJ ‘Lorito’ y sus últimos remixes.” En la invitación destaca la silueta de una chica con vestido corto bailando. Justo el tipo de imagen que encuentro super-sexy, excepto que ahora la encuentro menos erótica que una postal del Alcázar de Toledo.
    Pero también hay cosas buenas: vuelvo a creer en las coincidencias; en que las personas no se cruzan en tú vida por casualidad.
    Totalmente.

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  11. Respir…,
    a veces me siento como una bola de billar, lanzado hacia una dirección u otra por el impacto de sentimientos, de pensamientos…
    Las palabras desde lejos llegan a los pensamientos.
    Para llegar al alma hacen falta otras cosas. Y no me preguntes cuáles. En ese aspecto me muevo por instinto.
    Sí, yo también adoro Wagner; pero en su adecuado momento. Vamos que si pongo a Wagner ahora me tiro por la ventana. Déjame que de momento suene algo más superficial y alegre.
    Me encanta que te guste perderte en mis palabras. Es muy bonito que me digan eso. Gracias.
    Mil besos.

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  12. Carmela,
    con textos tan largos se pierde cualquiera, el mérito es llegar hasta el final. Pero mérito gordo. De todas formas, aquí estamos mi tío y yo para vestirnos de Coronel Tapioca y hacer de guía cuando haga falta.
    Siempre me da muchos ánimos saber que has pasado por mis palabras.
    Mil besos.

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  13. Mor,
    perdona todo este tiempo de ausencia. La mayor alegría que puedo tener a mi regreso es tener noticia tuyas y sentirte tan fuerte, tan luchadora y a la vez tan cálida y tan cariñosa como siempre.
    Estos textos son como pequeñas escenas. Cositas para entretener.
    Las “Crónicas de la Mariposa Negra”, no tienen nada que ver con la película peruana. Vamos, supongo yo, porque de la película no tenía noticia alguna.
    “Las Crónicas…” es un relato de amor, de predestinación, de ambiciones, de la eterna lucha del bien y del mal, y de la herencia de realidades oscuras que no podemos ni imaginar y que están descritas en un libro llamado “El libro de los Sollozos”. Pero, sobre todo, es la historia de un amor que parecía imposible.
    Mil besos.

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  14. Paloma,
    vaya una suerte la de mi tío, eso es tener enchufe… y a mí envidia que me da, ja, ja.
    Eres muy observadora o muy intuitiva: es cierto que “la bailaora” es una emboscada. Es un señuelo, uno más, para terminar conduciendo a JM a una determinada situación. No es la única persona que se está utilizando para eso. También sucede algo parecido en “Mujer delante de un cuadro de Turner”.
    Entre tanto, las pequeñas cosas, las cosas buenas y las tristezas de cada día.
    Rilke escribió “De tarde en tarde, un elefante blanco”. De tarde en tarde, uno encuentra algo especial, algo mágico, como la belleza que no se ve o el amor que surge de golpe.
    Me encanta saber que te sientes cómoda entre mis palabras. Yo me sentí así en las tuyas desde el primer momento.
    Gracias, especialmente por leer y comentar un texto tan largo para un blog.
    Besos y abrazos directamente de mí. Pepe El Viagra y mi tío, que se busquen la vida; no te digo.

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  15. Mi tío es como Pepito Grillo, siempre cuchicheando a mi oído. Yo, como buen Tauro, me tomo mi tiempo para decidir mis asuntos personales, aunque luego me sorprendo porque soy muy impulsivo en temas sentimentales. En fin, mi tío es la parte de sentido común que debería tener para esas cosas. Me dejo llevar demasiado por el corazón. Y no he aprendido con los años todo lo que sería de esperar. Así me va.
    Muchos de los textos de “los papeles arrugados” representan el “antes”: escenas de un pasado reciente, un pasado que también podría ser hoy. Y un hoy que se mezcla con un mundo de sueños. En cualquier caso, “Las Crónicas de la Mariposa Negra” significan entrar en un mundo distinto, visto desde dentro hacia fuera, una fantasía de esperanza y amor a través de la relación con una mujer muy especial, una mariposa negra.
    Gracias por volar entre mis palabras, hada de las mariposas.
    Mil besos.

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  16. Melody, hola, princesita. Perdona esta ausencia tan de golpe, no tuve más remedio, de vez en cuando tengo que hacer cosas así. Pero aunque me vaya lejos, sé que no me falta el cariño de mi princesita, sé que rápidamente se cose, zás, zás, a la tela de mis sueños y me acompaña a todas partes. ¡Guardo tu corazón como el tesoro más preciado del mundo!
    Y qué bien que te gustase el tema musical, a mí me encanta, lo he bailado montones de veces y ¿sabes qué?, me hace pensar en todas aquellas personas buenas que eran desconocidas y han ido apareciendo en mi vida para darme su afecto, su compañía, aunque estén lejos.
    Yo también soy un corazón con patas, ja, ja, y con una imaginación que estalla como un volcán. Aunque me vaya cargando de años y de años. Ummm, me encanta que te guste un tipo como Russel Crowe, ¿entonces, tengo yo alguna oportunidad?, ja, ja. Soy tal como me describo, un poco salvaje.
    Bueno, a ver si me voy poniendo al día, primero leyendo tu página y también las otras páginas amigas. Y luego escribiendo alguna cosilla. Y algunos versos oscuros también, brrrr, qué miedo, de vez en cuando.
    Gracias por estar siempre conmigo.
    Mil besos.

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  17. Luna, tienes el don de dar en el clavo, de ver más allá de las palabras. Por eso me chifla leerte, guau, la vida vista desde el metro. No, en serio, eres perspicaz y me encantan tus comentarios porque con dos palabras es como si me dejaras en pelotas.
    “Her passport shows a face
    From another time and place
    She looks nothin' like that.
    And all the remnants of her recent past
    Are scattered in the wild wind.”
    Black Diamond Bay
    Así me siento yo.
    Me caes super-bien.
    Mil besos.

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  18. Maica,
    encantado de recibir tu visita, sigilosa, suave y hermosa como las pisadas de un felino. Y feliz por nuestro reciente enlace, de nuestros blogs, claro, ja, ja.
    Dame tiempo a ir deslizándome por tus textos; de momento, me ha gustado mucho lo que he visto, así, un poquito rápido. Me tomaré un valium para no ponerme como una moto y volveré a leerte despacio.
    Entre tantas palabras ardientes y otras de seda, no sé cómo voy a acabar. Tengo que prohibir a mi tío que cotillee en determinadas páginas, cualquier día le da algo.
    ¡Qué chicas estas! No me extraña que los chavales de hoy día se sientan intimidados por las mujeres. Pufff.
    Lo dicho, un placer.
    Besos.

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  19. Hola, Intimista! He pasado sólo a saludar, pero con la intención de volver y leer este último post. Bueno, aunque publiques otro, iré un poco retrasada, pero me pondré al día en cuanto pueda.

    Recibe un abrazo muy fuerte, con cariño del buenazo, yo. :D

    Ps: Ah, espero que en ese viaje lejos te haya ido como tiene que ser, BIEN! ;)

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  20. Espro volver a leer tus relatos tan intrigantes.No me marcho definitivamente,he de ser fuerte para todo lo que se avecina...
    un millón de besos.
    Morgana

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  21. Andri, gracias guapa, no te preocupes. Y no te pierdas entre tanta palabra loca en mi página, ja, ja.
    Mil besos.

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  22. Mor, que feliz me hace saber que sigues aquí, a mi lado, aunque sea luchando y luchando. No te rindas.
    Mil besos, corazón, un abrazo muy fuerte.

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  23. jajajjajajja lo q escribí es apenas un fragmento de lo q tu escuchabas...
    Besos q lleguen hasta tus pensamientos, enviados desde mi alma.

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  24. Seguimos con este delicioso misterio, a ver dónde vamos a parar, yo tengo ganas de seguir leyendo, de descubrir alguna cosita, dame un poco de carne, que este saltito al pasado ha de mostrar más en el próximo capítulo.

    Besitos,

    Yo

    Ps: esa mariposa negra me tiene intrigada. ;)

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